lunes, 15 de diciembre de 2014
domingo, 14 de diciembre de 2014
Dos en uno. El árbol de la vida.
jueves, 10 de julio de 2014
Comunícate
La comunicación debe ir siempre unido al sentir.
Hablar de las cosas, de todo lo que te pasa por la mente es como una fuerza que te hace sentir vivo.
Si dejas de hacerlo pasas a un estado en el que tu cabeza sólo piensa en el qué y cómo de las cosas y que nacen sin madurar. En tormentas pero no de ideas, sino de pensamientos y a los que la mayoría no encontramos explicación. Mueren porque no salen a la luz.
Sí piensas en cómo hacer para mejorar eso no obtendrás un gran resultado al creer que debes comunicar pero de forma especial, algo con una cierta importancia. Y precisamente lo que se hace es forzar la situación y te hayas inmerso en una serie de palabras que, cómo decía mi abuelo, llegaba a la reducción al absurdo. Tienes que sentir la necesidad de expresar, deshacer el nudo. Quizás pensando en que no debe ser de relevancia siempre lo que has de expresar. Saber y confiar en que lo que digas es fruto de tu vida, de tus vivencias. Saber que aunque tú no lo encuentres interesante es la forma que tenemos de aportar un trocito de ti al mundo que te rodea.
Así somos los humanos. Tenemos la necesidad de hablar las cosas. Sean banales o puros ensayos, sean historias del día a día o puros premios novel. Necesitamos expresarnos y que se nos de la oportunidad, ya no sólo de decir lo que se nos pasa por la cabeza sino que, lo que es más importante, que haya alguien detrás que lo esté escuchando.
Por ello creo que todos llevamos un escritor, periodista, cuenta cuentos; dentro.
Hablamos, charlamos, pensamos...
Acciones a las que no le damos importancia y que, hacen sin darnos cuenta que el ser humano merezca la pena, sea libre.
Así quiero expresar que, me encanta escuchar y me interesa lo que todo el mundo a mi alrededor me pueda contar. Son ideas, pensamientos y palabras que me hacen crecer. Quiero de ellas beber hasta la última gota.
jueves, 10 de abril de 2014
La primavera
Ya ves, ya está aquí. Es la primavera.
Con sus luces y sus sombras. No hay una estación tan llena de vida y a la vez tan desconcertante. Sus colores son pura explosión de luminosidad y la atmósfera está saturada; rebosa optimismo. Aunque a la vez provoca unos cambios de humor que rozan la desesperación.
Hace unos días alguien me dijo que la tristeza es algo natural. Me revelé. ¿Natural? ¿Hay algo más coherente que pensar que es sano estar alegre? ¿Acaso tengo que dar la razón y pensar que debemos estar tristes para alcanzar, no sé que curva, y subir después al estado "de felicidad"?
Pues bien. Así será, si lo dicen los expertos pero yo, sigo pensando que quien es optimista tiene un tesoro y quien es alegre una virtud. Que nada es blanco o negro aunque he de reconocer que yo me voy al extremo. Pero, ¿no es mas bello pensar que se puede ser Feliz?
Creo que si ves esta foto es el fiel reflejo de lo que quiero expresar. Luz al final del túnel. No te fijes en la roca, en la oscuridad, fíjate en el árbol, en la vida, en la frondosidad.
La primavera es compleja. Como nosotras. Pero todo el mundo la ve bella, aunque no siempre sea fácil de llevar.
sábado, 8 de marzo de 2014
Mujer
Porque así somos y así seremos... la mujer.
Valientes, con carácter, resolutivas, responsables, locas, irracionales, amorosas, amantes, bellas, elocuentes, con don de gentes, comunicativas, víctimas, imaginativas, presumidas, ardientes, soñadoras, nerviosas, pasionales, hormonales, viscerales, enamoradizas, miedosas, sensibles, lloronas, impacientes, sagaces, brillantes, inteligentes, espabiladas, reincidentes, preciosas, valiosas,...
Gritamos, pero no nos gusta que nos griten.
Nos comemos la cabeza, pero nos gusta la gente sencilla.
Con genio, pero nos gusta la humildad.
Habladoras, pero valoramos el silencio.
Imaginamos, pero tenemos los pies sobre la tierra.
Pintamos la vida de color, pero desaturamos la realidad.
Nos gustan los retos, pero no que nos pongan las cosas difíciles.
Queremos libertad, pero contamos con los demás.
Sabemos lo que queremos, pero nos gusta que nos guíen.
Entendemos de todo pero, a veces, nos hacemos las tontas.
Guardamos las apariencias, pero sin disfrazarnos.
Tenemos las cosas claras, sólo que no lo sabemos.
Reímos mucho, pero lloramos más.
Volvemos locos a los hombres (en todos los aspectos y significados de la palabra en sí).
Nos gusta que nos den nuestro sitio, pero no nos sentimos víctimas.
No tenemos pelos en la lengua (ni en ninguna parte del cuerpo). Y además, esto último, hasta nos llega a gustar; eso un hombre jamás lo llegará a entender, pero nos encanta disfrutar y ver nuestro cuerpo recién depilado.
Somos fuertes y nos llaman el sexo débil.
Creemos en nosotras mismas y eso nada ni nadie lo podrá cambiar.
Por todo ésto y mucho más...
.... me enorgullece ser mujer.
viernes, 14 de febrero de 2014
"Defender la alegría"
Un sentimiento contradictorio, eso es lo que tengo.
Todos a mi alrededor y TODO señala a cosas positivas, a "defender la alegría". Ese era su lema y eso es lo que nos ha dejado pero...
No sé; es un poco sabor agridulce.
Eso es una realidad, ya que la VIDA nos ha privado de poder continuar disfrutando de su energía, su experiencia, su forma de ver este loco Mundo. Fue una enseñanza su presencia fugaz que nos ha marcado a todos; los que la conocimos y los que no.
No se si ella habría soñado algún día con que, cada mañana, tarde y noche que pasa alguien mantiene vivo su recuerdo. Que haya mucha gente que, sin conocerla, la echan de menos. No se si podría imaginar que conseguiría hacer de su persona un ejemplo vivo en nuestro día a día. Que cada atisbo de optimismo que asoma en nuestra rutina nos dice su nombre (nos la nombra).
Hablo por mi cuando digo que hay un lema en mi cabeza que es el pensar que todo es posible, pero que hay que saborearlo, disfrutarlo, buscarle la sal a la vida. Hablo por mi y hablo por ella y por todo el mundo. Esa es la esencia. El caerse y levantarse. El levantarse y sonreir. El reírte de ti y de todos y de TODO. El hacer de tu "que hacer" la mejor opción. El que tu banda sonora sea una de esas de película de los años 60. De Jazz. De Blues. De música fresca africana y de un Flamenco "hondo". De aquí, de allá, pero sólo MÚSICA. Música, alegría, recuerdo, un lema.
Sí, así es querida mía. Nos has dejado un nudo difícil de tragar. Pero también nos has dejado tu Inmortalidad.
¡Qué bueno haberte tenido, haberte conocido!. ¡Qué suerte que te hayan divulgado, que te hayan "contado"!. Porque así serás; un libro, un cuento, una poesía, una leyenda que vive en cada uno de nosotros.
Gracias querida amiga.
lunes, 27 de enero de 2014
Libre
Hoy quiero hablar sobre algo que me ronda la cabeza; La Sociedad.
Son ideas que me han ido surgiendo a raíz de; lo que hace poco más de un año me dijo una persona, que tiene la facilidad de removerme el coco con sus pensamientos.
La idea era que; si todos compartíamos algo tan preciado hoy en día como es el trabajo, haríamos una sociedad en la que todos tendríamos más oportunidades. Si en vez de trabajar 8 ó10 ó 12 horas al día trabajasemos la mitad, tendríamos más tiempo (palabra que más de uno ni conoce) para nosotros. Eso haría que existieran el doble de puestos de trabajo y... ¡Que casualidad! Eso nos llevaría a que éste estaría más repartido . ¡Vamos!, que el vocablo PARO tendría significado para menos gente. Casi no existiría. Habría más personas que trabajaría en su lugar de origen con el correspondiente ahorro, por lo que necesitarian invertir menos dinero y menos tiempo. ¡Vaya! otra vez sale la palabra TIEMPO. Tiempo para ti y los tuyos, para tus proyectos, tus ideas y para hacer las cosas que hacen que la vida sea vida.
Y si vamos más allá esto sería sostenible si equiparasemos los sueldos, claro está. Una madre podría trabajar, los jóvenes tendrían oportunidad sin tener que perder su juventud. Nos "consumiríamos" menos, seríamos más productivos, tendríamos más ganas y aportaríamos más a la sociedad.
¿Creéis que es posible?
Querer es poder, me dijo un día mi madre, y desde entonces soy la persona más cabezota del mundo.
Entre todos podemos hacer que cambie la mentalidad, que cambie la forma de ver las cosas y las prioridades.
Que la prioridad número uno sea la Felicidad y el sentirse bien y agusto con lo que eres y aportes a tu día a día.
Es posible.
Es creíble.
Podemos cambiarlo.
¿ Me sigues?